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Mordeduras - Primeros Auxilios
Cuidados y precauciones ante mordeduras de animales.
Introducción
En este artículo, discutiremos los pasos que debes seguir al realizar los primeros auxilios en relación a la lesión por mordedura de un animal, ya sea un perro, un gato u otro animal salvaje. Aprenderás sobre la importancia de los primeros cuidados, la prevención de infecciones, las señales de advertencia de complicaciones y la necesidad de buscar atención médica en las primeras horas de la lesión.
Clasificación de las heridas
Las heridas derivadas de los accidentes pueden ser clasificados en superficiales (sin sangrado) y profundos (hay sangrado, por lo que se considera que atravesaron la dermis). Las heridas profundas además de aumentar la exposición a gérmenes, ofrecen dificultades de asepsia, en este punto deberían destacarse aquellas heridas puntiformes que son considerados profundas y generalmente no presentan sangrado.
Heridas superficiales
Si ha sufrido una mordedura superficial sin comprometer la integridad de la piel, sin sangrado, siga estos pasos para garantizar una correcta curación e impedir posibles infecciones:
- Lave minuciosamente la herida con agua y jabón durante varios minutos. Esto ayudará a eliminar cualquier bacteria presente en la saliva del animal.
- Seca suavemente la zona afectada y aplique una pomada antibiótica recomendada por un profesional médico.
- Cubra la herida con un vendaje limpio para evitar la entrada de gérmenes.
- Controle regularmente la herida hasta que se cure completamente, observando signos de infección tales como enrojecimiento, hinchazón, calor excesivo o dolor intenso. Si detecta alguno de estos síntomas, consulte a un médico inmediatamente.
Heridas por mordeduras
Cuando se compromete la integridad de la piel, con sangrado, cuando existe herida puntiforme, son extensas o contaminadas debes buscar atención médica para evaluar la situación y poder ofrecer un tratamiento. Los siguientes consejos le proporcionarán instrucciones sobre qué hacer tras una mordedura:
- Lavar el área con agua tibia y jabón.
- Aplicar presión para detener el sangrado. Elevar el miembro.
- Usar una crema antibacteriana y cubrir con un vendaje estéril.
- Si es un perro o gato necesitamos conocer el historial de vacunación antirrábica.
- Busque atención médica profesional. Incluso si la herida parece insignificante, mantenga un control riguroso sobre su evolución. Una aparente lesión menor podría derivar en una infección grave o desarrollar otros problemas subyacentes.
Profilaxis Antibiótica
La profilaxis antibiótica oral se recomienda en mordeduras de animales de alto riesgo, como las que afectan las manos, la cara, o requieren reparación quirúrgica. La profilaxis antibiótica reduce significativamente la tasa de infección en mordeduras de la mano. La elección del antibiótico y la necesidad de profilaxis dependen de la ubicación y gravedad de la mordedura.
Profilaxis Antitetánica
El riesgo de tétanos depende principalmente del estado de vacunación previo y del tiempo transcurrido desde la última dosis. Si han pasado más de 10 años desde su última dosis o si no está seguro de haber tenido una vacuna contra el tétanos en los últimos 5 años (particularmente en heridas graves y sucias), es probable que necesite una dosis de refuerzo.
Prevención Antirrábica
La prevención de la rabia después de una mordedura de animal es sumamente importante para evitar la propagación de esta fatal enfermedad. A continuación, encontrará recomendaciones fundamentales sobre cómo abordar la prevención de la rabia en tales circunstancias:
Identifique al animal: Intente capturar o fotografiar al animal que lo ha mordido, siempre priorizando su seguridad. Esto facilitará la investigación de su historial de vacunación y el seguimiento de su comportamiento.
Busque atención médica inmediata: Acuda a un servicio médico de emergencia o consulte a un profesional de la salud lo antes posible. Explique claramente la situación y proporcione todos los detalles pertinentes, como el momento y lugar de la mordedura, las características del animal y su comportamiento.
La prevención antirrábica incluye la vacunación antirrábica preexposición para personas con alto riesgo de exposición, como veterinarios y trabajadores de laboratorio.
La profilaxis postexposición consiste en la limpieza de la herida, la administración de la vacuna antirrábica y la inmunoglobulina antirrábica humana.
